¿QUÉ SON LOS ÁCIDOS GRASOS OMEGA?
¿Cuántas veces has escuchado hablar de ácidos grasos? ¿Y del omega-3 y omega-6? ¿Millones?
Entonces para ti no será un misterio que los ácidos grasos omega son esenciales para mantener un buen estado de salud, pero también – y aquí profundizaremos – que está demostrado el beneficio de aplicarlos en la piel por vía tópica.
¿Qué son los ácidos grasos y para qué sirven?
Qué son los ácidos grasos esenciales?
¿Y los ácidos grasos omega, qué son?
Dónde se encuentran los omegas que necesitamos
En este post nos empaparemos de las múltiples propiedades de los ácidos grasos, de su papel en la salud de la piel, y de cómo su incorporación en la rutina de belleza logrará que tu piel tenga los nutrientes que necesita para lucir más saludable y con ese glow tan deseado.
¿Qué son los ácidos grasos y para qué sirven?
Los ácidos grasos son largas cadenas de hidrocarburos con un grupo carboxilo terminal (-COOH); son las unidades estructurales de los lípidos, a los que vulgarmente conocemos como grasas. Los ácidos grasos se clasifican como saturados o insaturados según si tienen o no algún doble enlace. Serán ácidos grasos monoinsaturados los que cuenten con un solo doble enlace en su estructura, y poliinsaturados los que tengan a más de un doble enlace.
¿Complicado? ¡No nos preocupemos!
Lo que es importante recordar es que los ácidos grasos son el principal componente de la membrana celular, la capa que envuelve a las células, protegiéndolas del exterior y modulando su rigidez, fluidez y permeabilidad, claves de su funcionamiento saludable.
¿Qué son los ácidos grasos esenciales?
Pues bien, dentro de la categoría poliinsaturada cobran especial importancia un grupo de ácido grasos que nuestro organismo no es capaz de sintetizar y por tanto deben obtenerse a través de la ingesta y de la aplicación tópica, especialmente cuando buscamos un efecto en las células cutáneas. Son los ácidos grasos esenciales (AGE).
La piel necesita ácidos grasos esenciales especialmente cuando se expone a situaciones de estrés, como quemaduras solares y otros procesos asociados a la debilitación de la función barrera como la pérdida de elasticidad, sequedad o incluso picor.
Estas situaciones causan una importante liberación de ácidos grasos de las membranas de las células de la piel, por lo que si se aumenta el aporte de los ácidos grasos bien a través de la ingesta o tópicamente, se reestablecerá su equilibrio en la membrana celular. Este aporte producirá un incremento de las prostaglandinas claves en la mediación de procesos antiinflamatorios y como consecuencia, por ejemplo, en la disminución del enrojecimiento o de la hinchazón.
¿Y los ácidos grasos omega, qué son?
Los ácidos grasos omega representan una subcategoría dentro de los ácidos grasos insaturados. Por un lado nos encontramos con los omega-3, los omega-6 y los omega-5, que son esenciales y deben obtenerse a través de la dieta, los suplementos y la aplicación tópica; y por otro lado y más residuales, los omega-9 y omega-7.
Se les llama omega por la posición de sus dobles enlaces, en el extremo opuesto al ácido carboxílico. Así, por ejemplo, un ácido graso omega 3 es el que posee el primer doble enlace en el carbono número 3.
Nos vamos al meollo y te explicamos los beneficios de cada uno de ellos y también donde puedes encontrarlos.
¿Para qué sirven los omega-3?
Los ácidos grasos omega-3 son 3 :-): el Ácido Alpha-linoleico (ALA), el Ácido Eicosapentaenoico (EPA) y el Ácido docosahexaenoico (DHA).
Tienen la capacidad de reparar la membrana celular dañada, contribuyendo a una piel más sana y más resistente a las amenazas internas y externas.
Contribuyen con su acción antioxidante al control de la acción de los radicales libres que se generan por influencia de los rayos UV, reduciendo el foto-deterioro inducido por la exposición solar. Finalmente tienen un poder beneficioso sobre el sistema inmunitario y propiedades antiinflamatorias.
Estos ácidos grasos son humectantes naturales, permiten combatir la sequedad y las asperezas, ayudando a mantener un adecuado grado de hidratación y previniendo así el envejecimiento cutáneo.
¿Para qué sirven los omega-6?
Los ácidos grasos omega 6 incluyen el ácido linoleico (AL), el ácido gamma-linolénico (AGL), el ácido dihomo-gamma-linolénico (ADGL) y el ácido araquidónico (AA).
Los omega-6 comparten beneficios y propiedades con los omega-3, destacando su poder epitelizante reparador y regenerador de la piel dañada. En concreto, el ácido linoleico (AL) es el AGE más abundante de la piel. Un déficit suyo, hace que la piel sufra pérdidas excesivas de agua y se vuelva escamosa.
Existen diferentes investigaciones sobre las potenciales propiedades beneficiosas de los omega-6 de cara al cuidado de las pieles acneicas ya que una disminución significativa del ácido linoleico en el sebo, podría contribuir a la formación del acné.
¿Para qué sirven los omega-9?
Estos ácidos grasos monoinsaturados pasan a menudo inadvertidos, aunque tengan una relevancia similar a la de sus parientes más cercanos los omega 3 y 6, tal vez porque no son esenciales ya que el organismo puede sintetizarlos.
Las dos formas más conocidas de omega-9 son las del ácido oleico y del ácido erúcico. Ambos, comparten con sus primos hermanos, los beneficios a nivel cutáneo de mantener la hidratación, mejorar la elasticidad de la piel, proteger contra la sequedad y reducir la inflamación.
Los omega-5 y omega-7
Mucho menos conocidos, tanto el omega-5 (ácido punícico) como el omega-7 (ácido palmitoleico) son grandes aliados para mantener una piel sana y bonita. Comparten propiedades beneficiosas con el resto de los omegas y, además, como subrayábamos en nuestro artículo sobre los beneficios de los aceites para el cuidado de la piel, el ácido punícico tiene un gran poder antioxidante y favorece la síntesis de los queratinocitos, clave en procesos de regeneración celular.
Dónde se encuentran los Omegas que necesitamos
Si es verdad que “somos lo que comemos”, entenderás la gran necesidad de sumar a nuestra dieta una buena ingesta de alimentos ricos en ácidos grasos esenciales desde nueces y aguacates, a pescado azul o comidas ricas en aceite de girasol.
Hasta aquí pocas novedades, pero ¿y si pudiésemos hacer un favor a la salud de nuestra piel haciendo un aporte extra de omegas vía tópica a través de su incorporación a nuestra rutina cosmética de cuidado de la piel?
En UMOA somos fieles creyentes de que para conseguir una piel suave, sana y brillante, nuestro cuidado debe foner el foco en garantizar la hidratación y la nutrición adecuadas, preocupándonos de mantener la capa lipídica en equilibrio para reducir la evaporación de la humedad, promoviendo el correcto funcionamiento celular.
Para lograrlo, la incorporación a nuestras fórmulas de aceites vegetales con grandes cantidades de ácidos grasos omega, ha sido clave.
Por ejemplo, el aceite de cáñamo cuenta con una proporción óptima entre omega-6 y omega-3, en ratio 3:1, un equilibrio que le otorga múltiples propiedades beneficiosas para la salud de la piel desde el refuerzo de la barrera cutánea, al alivio de tirantez y el picor asociados con una piel especialmente seca, reduciendo la necesidad de recurrir a un tratamiento médico.
El aceite de sacha inchi con su también alto contenido en omega-3 (>45%), omega-6 (>35%) y en menor proporción de omega-9, estimula la producción de colágeno contribuyendo a recuperar la firmeza de la piel, a prevenir el envejecimiento celular tras la exposición solar y a ayudar a regular la producción de lípidos en las pieles grasas.
Finalmente, también el aceite de sésamo es muy rico en omegas y por sus propiedades es considerado todo un esencial en la cosmética coreana.
Estos 3 ingredientes están presentes en la fórmula de The Bright Oil 14 combinados en un mismo tratamiento corporal, con el que recuperar los adecuados niveles de ácidos grasos de tu piel.
La fórmula de The Bright Oil reúne un total de 14 aceites naturales entre los que también encontramos el aceite de granada único por su riqueza en ácido punícico (omega-5) cuya importante acción antioxidante, lo convierte en un gran aliado de los tratamientos antiedad. Se unen a esta lista entre otros, el aceite de aguacate, el aceite de oliva o el aceite de rosa canina.
Todos ellos son algunos de los tantos ingredientes ricos en omegas, importantes aliados para una piel bonita y brillante. Así que asegúrate de incluir elementos que los contengan en tu dieta diaria y en tu rutina de belleza para darle a tu piel los nutrientes que necesita para lucir y sentirse siempre de 10.
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